A diferencia de los programas extracurriculares tradicionales donde los educadores son los únicos que toman las decisiones sobre la participación de los estudiantes, el Proyecto de Excelencia, marcado por el aprendizaje acelerado, permite la autoidentificación entre los jóvenes, así como entre los padres y cuidadores. A través de esta iniciativa, los estudiantes de inglés, los estadounidenses de primera generación, los estudiantes de educación especial y otras poblaciones diversas de jóvenes pueden reconocerse y nominarse a sí mismos como superdotados y talentosos, y obtener acceso a las herramientas, recursos y apoyo que les permitirán desempeñarse a un nivel superior y alcanzar su máximo potencial.